Lo bueno se hace esperar.
Fue allá por el 8 de noviembre con un público que llenaba y que se encontraba expectante ante lo que le venía encima, una hora y pico de teatro intenso, de ritmo endiablado, de una
Fue allá por el 8 de noviembre con un público que llenaba y que se encontraba expectante ante lo que le venía encima, una hora y pico de teatro intenso, de ritmo endiablado, de una